Cuentan que Ulises no amaba el mar,
y es porque estaba prisionero
en sus brisas, sus olas y tormentas,
como entre cobertores guarnecidos con encajes.
Igual me ocurre a mí. No amo la poesía
y aún me rindo a ella, me tiene prisionero
y salvo lo que soy, nada puedo al lector ofrecerle.
Como aquel que continuamente cambia
de posición los remos y regresa, jugándoselo todo,
a un cuento donde no será reconocido,
entre imágenes que elige con cuidado:a un cuento donde no será reconocido,
Soy ese cerdo.
Soy esa fresa en el jardín.
Soy el humo de esa pipa.
Soy ese espumarajo en la boca.
Soy esa rueda.
Soy esa mano que la rueda oprime
al pasar mientras cruje la grava
en paralelo a otra rueda.
ALGUIEN MÁS
Supón que estás detrás de alguien que se ha vuelto de espaldas,
¿te imaginas que él es tú, mientras alguien más detrás de ti
ve lo que estás viendo?
Si ocurre que es una mujer (¿y por qué no?)
¿eres tú esa mujer con aire derrotado,
eres alguien más que mira a tus espaldas?
Si hay dos personas, un hombre, una mujer,
entonces eres cada una. Posees en igual medida
tanto los atributos de uno como los de la otra.
Sólo que si imaginas que te ves a ti mismo a tus espaldas,
no eres entonces quien eres.
Nada tienes en común con ese desgraciado prójimo.
Aleksandar Ristovic
Traducción del inglés de Abraham Gragera
"Si hay dos personas, un hombre, una mujer,
ResponderEliminarentonces eres cada una."
Brutal. Olé!
la realidad es estar de espaldas
ResponderEliminarMuy lindo trabajo con las traducciones.
ResponderEliminarSiempre una delicia pasarse por aquí.
ResponderEliminarAbrazo(s)
Pues vaya coincidencia.Muy buenos los dos, aunque me gusta mas el primero. A ver si alguien se animase a traducir algún libro suyo al castellano
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